Ir al contenido principal

Esto va de ACEPTACIÓN


Has diseñado una estrategia perfectamente estructurada, te has preparado en consecuencia para ponerla en marcha, y has invertido toda tu energía realizando acciones realmente positivas, cuando de repente ocurre algo que te cambia todos los planes. ¿Te suena, verdad?
El liderazgo de hoy en día, si de algo necesita, es de personas que cuenten con una gran capacidad de aceptación. ¡¡Ojo!!, no confundir con resignación. Aceptar es entender lo que ocurre, modificar la estrategia cuando sea necesario, y continuar adelante, mientras que la resignación está directamente relacionada con la bajada inminente de brazos, y con el pensamiento de que nada podemos hacer para cambiar las cosas, salvo, eso sí, culpar a la vida de todas nuestras desdichas, algo que algunas personas lo tienen perfectamente interiorizado, y se les da de maravilla. Si conoces a alguna de ellas, te recomendaría que te alejes todo lo que puedas de ella, porque lo único que harán es darte lecciones de negatividad que te conducirán a ese mundo llorón, triste y mediocre, por el que no es nada recomendable transitar.
La aceptación es algo que debemos entrenar a diario, porque no sólo en el ámbito profesional, si no también en el personal, las cosas no siempre serán como nosotros lo hayamos planificado. Si diriges un equipo debes saber, y aceptar, que tal vez mañana alguno de sus miembros puede ponerse enfermo y traerte un parte de baja, o puede presentarse ante ti diciendo que le ha surgido una buena oportunidad y que abandona la empresa, y tantas y tantas otras casuísticas que pueden hacer que te sientas mal después de que creías que lo tenías todo perfectamente organizado. En ese mismo instante, es cuando tu capacidad de aceptación deberá ponerse en marcha, y por tanto, cuanto mayor sea, más soluciones te ayudará a encontrar.
Algo fundamental cuando las cosas no salgan como habíamos pensado, cuando las estuvimos organizando, es no desperdiciar el tiempo criticando ni buscando culpables, aunque tampoco culpandonos a nosotros mismos. Tampoco vale eso de que “las cosas son como son”, algo que está relacionado directamente con la resignación. Aceptar es saber que cada persona es única, y que sus actuaciones, decisiones y acciones no dependen de nosotros, si no que en nuestro papel de líderes de equipos, debemos estar preparados para modificar el rumbo cada vez que la situación lo requiera.
Permíteme hacerte una pregunta: ¿Alguna vez has ganado algo cuando te has enfadado, ofendido o amargado en ese momento en el que, después de haber invertido tu tiempo, entusiasmo y energía, los planes no han salido como habías previsto, por algún tipo de imprevisto ajeno directamente a ti? Creo saber tu respuesta.
En cambio, ¿qué pensarías si te dijese que ese mismo imprevisto es un regalo de incalculable valor que la vida ha puesto a tu disposición? También creo saber la respuesta. Pensarías que estoy como una regadera. Tal vez tengas razón, no voy a renunciar a mi punto de chaladura tan fácilmente, aunque te diré que si el adquirir una nueva experiencia no es un formidable regalo, es porque a estas alturas, la resignación sigue pesando más que la aceptación. ¡¡Hay que seguir entrenando!!
Aceptar es saber que hay cosas que por muy preparadas que tengamos, tal vez no salgan como esperamos. Aceptar es valorar las experiencias como herramientas de incalculable valor que nos permitirán avanzar. Aceptar es poner en valor a la Vida. Aceptar es valorar nuestro tiempo, y no malgastarlo culpabilizando a nada ni a nadie, ni buscando esas excusas que al final nos hacen sentir frustración y que no nos permiten ver y valorar el resto de cosas y objetivos que nos planteamos y que si que nos salen bien y conseguimos de manera habitual. Aunque claro, eso lo damos por hecho, y en lugar de celebrarlo, le quitamos todo su valor.
Saquemos la resignación de nuestra Vida y permitamos que la aceptación ocupe su lugar. Después demostremos constancia entrenandola continuamente. De eso modo, cuando algo salga mal, que saldrá, en lugar del fin del cuento, sabremos que será el inicio de una nueva historia de éxito para nosotros. Acéptalo. Las cosas buenas también ocurren. 

José Lorenzo Moreno López
©jlml2020

Imagen: alphawallhaven

Comentarios

Entradas populares de este blog

Todas las personas SON IMPORTANTES

¿Quienes son las personas importantes?. ¿Un músico es importante?. ¿Un deportista es importante?. ¿Un lider politico es importante?. La realidad más cierta es que toda persona es importante. Por eso hay que discernir entre persona importante y persona relevante o celebridad. Nosotros y nuestros equipos somos tan importantes como cualquier otra persona. Porque nuestra vida es tan importante y maravillosa como pueda ser la de otro ser humano. Nosotros tenemos nuestros objetivos, nuestros intereses, nuestras inquietudes... y nuestros resultados, porque la relevancia mediatica de una persona no la eleva por encima de otra en cuanto a importancia. Todos tenemos que aportar algo al mundo. Nuestra actitud positiva marca como nuestros equipos afrontarán sus retos, que en definitiva son los nuestros. Las personas que destacan, que nos enseñan, que nos motivan, no son ni más ni menos importantes que nosotros. La única diferencia tal vez es que se hayan ocupado de aprovec

Liderazgo y DIBUJOS ANIMADOS

Los fines de semana aprovecho para estar en casa con mi mujer y con mi hijo. El resto de la semana trabajo fuera y por lo tanto intento aprovechar ese tiempo al máximo. Mi hijo de tres años, el que me lidera desde chiquitito, es un fan absoluto de los dibujos animados. Si con tres años no lo es, no sé cuando lo será. Además, sus "obligaciones" de chiquitín se lo permiten. Esto quiere decir que a mi edad, me conozco practicamente toda la parrilla de series animadas que existen en TV, sea cual sea el canal, y el otro día en uno de ellos estaban poniendo un episodio de "Los Pinguinos de Madagascar". Para aportar pistas puedo decir que estos pinguinos son los que aparecian en la pelicula "Madagascar" y de los cuales han hecho una serie exclusiva. Si vemos los episodios podremos comprobar que son un grupo homogeneo y unido ante las adversidades y pruebas que tienen que pasar para quedar por encima de los retos que normalmente le marca un "

"Se nos va el vino en catas". ANALIZAR Y ACTUAR CON DECISION

"La mayoría de la gente dedica mas tiempo y energía hablando de los problema que afrontándolos". Henry Ford. Suele pasar muy a menudo. Sabemos que hay un problema y empezamos a analizar, y a analizar, y a analizar, y darle vueltas, y a ver como, y a ver como no.... entonces, pasa lo inevitable, se nos acaba "yendo el vino en catas", tal como dice este dicho que en La Mancha utilizamos bastante. Y es que cuando nos hemos dado cuenta, ya es demasiado tarde. El dicho es muy claro. Abrimos la botella y probando poco a poco a ver como está el vino, terminamos por bebernos la botella, y cuando vamos a comer o a cenar, no nos queda. Con los problemas pasa igual. Hay una cosa clara: Por mas que hablemos sobre algo que está saliendo mal, esto no cambiara, ni mejorara. Al contrario, lo único que hará sera reafirmarnos en la idea de que, es cierto, y que realmente algo esta fallando. Pensando en el error/problema/contratiempo, o como queramos llama