Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de marzo, 2014

"Bienvenidos al Mundo de las Oportunidades". El Libro

Ya está aquí. "Bienvenidos al Mundo de las Oportunidades" es mi segundo libro, después de que "Liderazgo Terrenal" viese la luz allá por Septiembre de 2012.  Está disponible en formato PDF para aquellos de vosotros que estéis interesados en tener un ejemplar, por supuesto de manera gratuita.  Solamente tenéis que solicitarme una copia a mi dirección de correo electrónico, lamagiadeliderareltalento@gmail.com, y os lo haré llegar a la mayor brevedad posible. Gracias por todo vuestro apoyo!!!!  José Lorenzo Moreno López

¿Estamos seguros de que APORTAMOS VALOR AÑADIDO?

Hoy voy a comenzar este articulo al revés. Y no es que vaya a escribir de arriba a abajo ni de izquierda a derecha, sino que voy a hacer el resumen en estas primeras lineas. Un Líder tiene razón de ser cuando sabe que su función principal es la de aportar valor añadido. Todo se resume en esta frase. Ya podemos darle las vueltas que queramos a todo lo demás, pero si no es así, podremos decir que somos cualquier cosa, pero no Lideres. Y es que en muchas ocasiones se tiene el concepto de que quien está al frente de un grupo de personas es un Líder por definición cuando no es así.  Para aportar valor añadido debemos ser en primer lugar conscientes del puesto que ocupamos. ¿Obvio verdad? Pues no siempre es así. Pensamos que aportar valor añadido es ser mejor que nuestros colaboradores haciendo su trabajo. ¡¡Ojo!! esto no significa que no sepamos hacerlo, que no conozcamos lo que hay que hacer, o que no lo hagamos en determinadas circunstancias, pero no por consiguien

El Paso del Tiempo INCLUYE A NUESTRAS CREENCIAS

Es curioso lo que nos ocurre. Resulta que pasan los años y empezamos a decir cosas tales como: “debo estar envejeciendo, porque mi cuerpo no me deja hacer las cosas que hacía antes”, “me hago mayor porque antes salía y aguantaba toda la noche, y ahora no aguanto nada”, “antes…si….ahora…no”, etc, etc… Evidentemente pasan los años, pero mientras que lo notamos prácticamente en todo, hay una cosa a la que parece no afectarle tanto, aunque lo que ocurre es que nos negamos a que nos afecte. Y son a nuestras creencias y supuestos. Estas intentamos conservarlas siempre jóvenes, sin ser conscientes de que el paso de los años les afecta mucho más que al resto de las cosas. Resulta que queremos ser los mismos en cuanto a pensamientos que lo éramos hace años. Nos negamos a admitir que para ellos también pasan los años. ¿Por qué? Muy sencillo. Para evitar cambiarlas en nuestro convencimiento absoluto de que lo que era valido hace quince, diez o cinco años, es válido hoy también. Algo ta