Ir al contenido principal

¿Qué sueles PENSAR DE TÍ?



Permíteme, para empezar este artículo, que te haga una pregunta: Cada vez que dices, "es que soy así", ¿de verdad te lo crees? ¿Realmente eso es lo que piensas de tí? Si tu respuesta es afirmativa, tengo algo que decirte: Te estás infravalorando de manera gratuita y voluntaria.

Y digo de manera gratuita y voluntaria, porque si existe algún límite es el que nos ponemos a nosotros mismos con nuestros propios pensamientos. Al fin y al cabo, todo lo que conseguimos tiene mucho que ver con lo que esperamos.

En muchísimas ocasiones, "es que soy así" no es más que una excusa voluntaria para no hacer nada, un alegato contra la esperanza, una forma de limitarnos de manera mediocre. No es que seas así, es que quieres ser así, porque cuando una persona no está satisfecha con las cosas que hace, con lo que consigue, con la forma de desperdiciar  la vida,  se pone manos a la obra para revertir esa situación a través de su actitud, de sus pensamientos, de su determinación y de su acción, con la intención de cambiar el "es que soy así" por el "voy a ser así".

"Nuestra forma de pensar determina nuestra manera de vivir. Grandeza o mediocridad, la decisión es nuestra"

Las expectativas aquí influyen de manera muy poderosa. Tendemos a marcarnos bajas expectativas para no sufrir por posibles fracasos posteriores, sin darnos cuenta de que eso lo único que hace es abrirnos la puerta de la mediocridad más absoluta. ¿Un fracaso que es? Simplemente un resultado. 
Sin embargo, unas altas expectativas nos invitan continuamente a dar lo mejor en cada momento, y aunque no lleguemos a alcanzarlas completamente, lo que consigamos siempre será mucho más valioso.

Tal vez creas que si piensas bien de tí, no estás siendo humilde, algo que es absolutamente falso. Ya sabes, la humildad es un valor fundamental, eso sí, siempre que sea bien utilizada. Hoy en día el concepto humildad está muy manoseado y acaba siendo utilizado como simple postureo.

Pensar bien es darnos valor. Pensar bien es conocer nuestras fortalezas, para reforzarlas, y debilidades, para mejorarlas. Pensar bien es saber, y demostrar, lo que realmente podemos hacer. Pensar bien es estar alineados con nuestros propios valores, en lugar de estar pendientes continuamente del que dirán los demás.

Si pensamos que tenemos mucha edad, la tendremos (los años pesan más en la cabeza que en el corazón). Si consideramos que nuestra experiencia no sirve, no servirá. Si creemos que carecemos de información, no la tendremos. Si pensamos en negativo, seguro que andaremos por la vida restando.
En cambio, si nos consideramos creativos, comenzaremos a darle rienda suelta a la imaginación, si descubrimos nuestra pasión, haremos las cosas de manera apasionada, si entendemos, por fin, que somos personas únicas e irrepetibles, aportaremos ese valor añadido que nos hace absolutamente diferentes, y entonces iremos por la vida sumando.
La elección, como casi siempre, está en nuestras manos.

Los retos y los desafíos no desaparecerán con tan sólo pensar bien de nosotros mismos. Lo que si cambiará de forma radical será nuestra manera de afrontarlos. Y todo a través de las expectativas que tengamos puestas en nuestras propias capacidades. Por eso, cuanto más altas sean, más motivados, animados e implicados nos encontraremos, y todo gracias a las cosas positivas que estamos convencidos de que sabemos y podemos hacer.

A partir de ahora te invito a que pienses de ti de la manera más positiva de la que seas capaz, y a que le eches un vistazo a todo lo que has conseguido cuando has tenido el valor de elevar tus expectativas. Seguro que cuando lo hagas esbozarás una sonrisa sincera y te pondrás en marcha para dejar atrás ese vulgar y mediocre, "es que soy así", por el más eficaz y grandioso, "voy a ser así".



José Lorenzo Moreno López

©jlml2019




Comentarios

Entradas populares de este blog

Todas las personas SON IMPORTANTES

¿Quienes son las personas importantes?. ¿Un músico es importante?. ¿Un deportista es importante?. ¿Un lider politico es importante?. La realidad más cierta es que toda persona es importante. Por eso hay que discernir entre persona importante y persona relevante o celebridad. Nosotros y nuestros equipos somos tan importantes como cualquier otra persona. Porque nuestra vida es tan importante y maravillosa como pueda ser la de otro ser humano. Nosotros tenemos nuestros objetivos, nuestros intereses, nuestras inquietudes... y nuestros resultados, porque la relevancia mediatica de una persona no la eleva por encima de otra en cuanto a importancia. Todos tenemos que aportar algo al mundo. Nuestra actitud positiva marca como nuestros equipos afrontarán sus retos, que en definitiva son los nuestros. Las personas que destacan, que nos enseñan, que nos motivan, no son ni más ni menos importantes que nosotros. La única diferencia tal vez es que se hayan ocupado de aprovec

Liderazgo y DIBUJOS ANIMADOS

Los fines de semana aprovecho para estar en casa con mi mujer y con mi hijo. El resto de la semana trabajo fuera y por lo tanto intento aprovechar ese tiempo al máximo. Mi hijo de tres años, el que me lidera desde chiquitito, es un fan absoluto de los dibujos animados. Si con tres años no lo es, no sé cuando lo será. Además, sus "obligaciones" de chiquitín se lo permiten. Esto quiere decir que a mi edad, me conozco practicamente toda la parrilla de series animadas que existen en TV, sea cual sea el canal, y el otro día en uno de ellos estaban poniendo un episodio de "Los Pinguinos de Madagascar". Para aportar pistas puedo decir que estos pinguinos son los que aparecian en la pelicula "Madagascar" y de los cuales han hecho una serie exclusiva. Si vemos los episodios podremos comprobar que son un grupo homogeneo y unido ante las adversidades y pruebas que tienen que pasar para quedar por encima de los retos que normalmente le marca un "

"Se nos va el vino en catas". ANALIZAR Y ACTUAR CON DECISION

"La mayoría de la gente dedica mas tiempo y energía hablando de los problema que afrontándolos". Henry Ford. Suele pasar muy a menudo. Sabemos que hay un problema y empezamos a analizar, y a analizar, y a analizar, y darle vueltas, y a ver como, y a ver como no.... entonces, pasa lo inevitable, se nos acaba "yendo el vino en catas", tal como dice este dicho que en La Mancha utilizamos bastante. Y es que cuando nos hemos dado cuenta, ya es demasiado tarde. El dicho es muy claro. Abrimos la botella y probando poco a poco a ver como está el vino, terminamos por bebernos la botella, y cuando vamos a comer o a cenar, no nos queda. Con los problemas pasa igual. Hay una cosa clara: Por mas que hablemos sobre algo que está saliendo mal, esto no cambiara, ni mejorara. Al contrario, lo único que hará sera reafirmarnos en la idea de que, es cierto, y que realmente algo esta fallando. Pensando en el error/problema/contratiempo, o como queramos llama