Y cuando digo mínimos me refiero a que un líder debe tener muy claro que su principal función es aportar valor añadido, algo que pasa por ir siempre un poquito mas allá, o mejor dicho, hacer algo diferente a lo establecido.
Una forma diferente y muy importante estaría enfocada a su estilo, a sus formas, y a la manera de comportarse y dirigirse hacia sus colaboradores.
Hay quienes creen que el simple hecho de que una persona tenga trabajo le obliga a realizar las funciones para las que se le ha contratado. Y es cierto. No voy a negar la mayor. Eso si, el "tu trabaja, que yo ya te pago", no es ni mas ni menos que una cuestión de mínimos.
Por eso, en creencias de jefes desactualizados, el compromiso de una persona debe venir de serie e implícita a un contrato, cuando nada mas lejos de la realidad.
El compromiso no se pide. El compromiso se genera. Y para generarlo se necesitan una serie de cualidades que un líder siempre tiene que tener muy en cuenta y para las que tiene que estar lo suficientemente preparado.
No se trata de pedir por pedir. Se trata de generar para conseguir. Y esto viene una vez que estamos realmente convencidos de que en las relaciones profesionales, y también en las personales, debemos ir más allá de limitarnos a pensar que porque a una persona se le pague puntualmente a final de mes, tenga las vacaciones que le corresponden, o disfruten de los beneficios que su contrato le otorga, podemos hacer con ellas lo que nos venga en gana, cuando con eso lo único que hacemos es cumplir con una serie de mínimos.
Una persona acudirá a su trabajo a la hora que se le indique, eso si, lo hará de una manera muy diferente si nosotros le explicamos que es lo que esperamos de ella, y realizará las funciones para las que están contratadas con una actitud totalmente distinta dependiendo de como estén dirigidas.
Y así muchos ejemplos mas, aunque todos están relacionados con la capacidad de liderazgo que tengamos o estemos dispuestos a desarrollar, algo que definiremos claramente cuando seamos conscientes de entender que el liderazgo va más allá de unos mínimos, y que cuantos mejores entornos positivos seamos capaces de diseñar para que las personas que integran nuestros equipos pueden desarrollar con efectividad, motivación e implicación sus funciones, mucho mejores serán los resultados que obtendremos, y que serán totalmente opuestos a los que conseguiremos si nos dedicamos a echarle en cara a nuestros colaboradores continuamente que están a nuestra disposición, porque los mínimos que firmó en un papel así lo establecen.
Seguro que todos hemos escuchado e incluso sufrido frases del estilo: "por eso te pago...", "no te quejes que te vas de vacaciones...", etc, etc, Pues tristemente, esas frases aún se repiten en estos tiempos. Frases que deberían hacer reflexionar no solo a quienes las pronuncian, sino a quienes tienen, y mas aún, a quienes mantienen, a personas con ese estilo de dirección al frente de sus empresas, organizaciones y unidades de negocio.
Esas frases nos hablan de mínimos. ¿Que me pagas? ¿Que me das vacaciones?... ¡¡estaría bueno!! Como veis, todo cuestión de mínimos.
Cuando dirigimos equipos, las cuestiones mínimas y fundamentales debemos darlas por sentadas, y a partir de ahí, establecer un estilo de liderazgo que esté enfocado a desarrollar al máximo el talento de cada una de las personas que componen nuestros equipos, algo que sin duda nos ayudará a seguir creciendo nosotros mismos.
Dirigiendo a través de mínimos no seremos lideres. Seremos administradores. Dejando los mínimos a un lado estaremos enfocados en avanzar continuamente, porque además, un líder es una persona en continuo desarrollo, y limitando a sus colaboradores, se limita a si mismo.
Quien vive en los mínimos, pensando en ellos, y recordándolos frecuentemente, está muy alejado de lo que requiere el liderazgo de hoy en día, ya que un líder real sabe que el éxito no acepta condiciones, y que solamente éste estará a su alcance cuando haga todo lo que tenga que hacer, entregando su compromiso de manera natural e incondicional.
Y hacer avanzar a las personas que componen su equipo, dejando atrás aquellos mínimos que no le llevan a ninguna parte, es una de las maneras mas efectivas para conseguir alcanzarlo.
José Lorenzo Moreno López
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