Después, definir prioridades es la clave para conseguir marcar una verdadera diferencia efectiva y positiva, ya que si decidimos ir a por todas, tal vez no consigamos nada, mientras que si enfocamos nuestro esfuerzo en un objetivo claro, nos ser mucho más sencillo, que no siempre fácil, alcanzarlo.
Para ello nos queda un punto muy importante, y es el de la Acción, porque por muy buen plan que tengamos, por muy buenas estrategias que hayamos trazado, y por muy claras que tengamos nuestras prioridades, si no le aplicamos la acción necesaria, nunca conseguiremos llegar al éxito, y todo se nos quedará en magníficos castillos en el aire.
Marcar prioridades en primer lugar, y aplicarles acción a continuación, es el orden correcto para dejar atrás la fría mediocridad y cruzar la barrera que nos acercará a la más absoluta efectividad.
José Lorenzo Moreno López
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