Ir al contenido principal

El Maravillo Mundo de la GESTION DE PRIORIDADES

Entender prioridad como la anterioridad en el orden o en el tiempo de una cosa respecto de otra debería servir para darle importancia a las cosas que mas necesitan nuestra atención ante las que no lo requieren tanto. Entonces, ¿porque nos cuesta tanto priorizar?
No todo tiene la misma importancia. Estemos seguro, no la tiene. Siempre hay algo que necesita una atención especial respecto a otra cosa. No es lo mismo construir los pilares y la estructura de una casa que colgar un cuadro. Somos nosotros los que nos encargamos de hacer que todo sea urgente, y no es así. Siempre habrá una cosa más importante que la otra.
¿Qué nos suele ocurrir?. Pues que en nuestro afán de convertir cualquier circunstancia en prioritaria acabamos frustrados y diciendo que "no llegamos a todo", "no tengo tiempo", y demás excusas similares que no son más que justificaciones para decir que hemos hecho o hemos dejado de hacer algo.
Una clave en el éxito de un líder pasa por su capacidad de priorizar, de separar lo que es importante de lo que no lo es tanto, de saber que hay que hacer en cada momento, entendiendo y sabiendo que habrá otra cosa que quedará desplazada, pero ese es el secreto, entender que para ser efectivos hay que hacer lo que hay que hacer y porque hay que hacerlo. No se puede contentar a todo el mundo. Cuando queremos hacer nuestras las prioridades de todos los que nos rodean, está claro que no llegaremos a satisfacer ninguna, y lo que es más importante, estaremos dejando de lado las nuestras propias, las que marcan nuestro camino, las que nos ponen rumbo al objetivo, las que no salen en las estadísticas, pero que son al fin y al cabo las que nos definiran como personas efectivas, ya que un líder debe ser un extraordinario gestor de prioridades.
Para gestionar las prioridades tenemos que tener claro que la que ahora está en el número uno, mañana puede estar en el seis, y la que está en el ocho, puede pasar a ser la primera. Solo puede haber una arriba en la lista. Ahora bien, ¿cuantas veces hemos confundido prioridad con distracción pasajera?.
Lo explico mejor. Estamos en nuestra labor, con nuestra prioridad, y de repente se nos cruza por delante una distracción que no es prioridad, pero que dejamos que ocupe su lugar, ya que directamente dejamos lo que estamos haciendo para inmediatamente ocuparnos de lo segundo, que seguramente puede solucionar alguien de nuestro equipo, ya que doy por hecho que están lo suficientemente preparados para ello, porque nosotros como lideres nos hemos preocupado por que lo estén, pero que nos ha distraido haciéndonos perder un tiempo precioso que podíamos haber invertido en aquello que habíamos decidido que era nuestra prioridad inmediata. Y aún peor, hay personas a los que les encantan esas distracciones y no pueden evitar dedicarle tiempo del que más tarde dirán que no tienen.
Además, esos lideres que adolecen de la capacidad de priorización corren un grave riesgo, y es que sus colaboradores detecten en ellos esa carencia y les hagan participes de todas sus incidencias, sabiendo que este les va a hacer caso inmediatamente, aunque tenga que dejar lo que está haciendo, con lo que se invierte el orden en la "delegación", y entonces los que deleguen sean los de abajo en el de arriba, y no las decisiones importantes, que a un líder le corresponde hacer, sino cualquier cosa de ínfima importancia que deberían haber sido capaces de resolver ellos mismos, y que por comodidad, no hacen ya que prefieren que les saquen las castañas del fuego por pequeño que sea el asunto.
Todo el día estamos eligiendo y priorizando. Desde primera hora de la mañana. ¿Qué ropa me pongo?. ¿Qué desayuno?. ¿Carne o pescado?, etc, etc... La vida es elegir y priorizar continuamente, sabiendo que cuando nos decidimos por algo estamos dejando de lado otro conjunto de posibilidades. Pero para disfrutar de algo no hay otra opción. Priorizar, y algo más importante. Saber hacerlo sin que nos cause ningún tipo de frustración.
Ya decíamos que "la ilusión del control" puede ser un motivador de primer nivel, pero también puede ser un gran archienemigo, porque como decía el Maestro Oogway, "nunca alcanzarás tu destino hasta que no abandones la ilusión del control". Y en ocasiones a través de acaparar prioridades sin darle sentido e importancia a cada una, pensamos que el control está más cerca.  Nada más lejos de la realidad.
Conseguir un objetivo requiere que hayamos trazado un plan de acción, y este pasa por definir prioridades. Puede ser difícil, porque sabemos que para elegir algo deberemos dejar de lado otras cosas, pero el camino de la excelencia es mucho más genuino y reconfortante que vivir en la continua mediocridad de unas prioridades mal gestionadas.
No tengamos miedo a priorizar, y sobre todo, a dejar que otros también prioricen las suyas, y en cualquier caso invirtamos nuestro tiempo en que cada uno de nuestros colaboradores tenga claro como hacerlo haciendose responsable de las mismas. Solo así les ayudaremos a crecer y a desarrollarse como lideres, que no es otra que nuestra propia misión, ya que un líder no debe generar seguidores, sino más lideres.

José Lorenzo Moreno López
Foto: Mujeresdeempresa.com

Comentarios

Entradas populares de este blog

Todas las personas SON IMPORTANTES

¿Quienes son las personas importantes?. ¿Un músico es importante?. ¿Un deportista es importante?. ¿Un lider politico es importante?. La realidad más cierta es que toda persona es importante. Por eso hay que discernir entre persona importante y persona relevante o celebridad. Nosotros y nuestros equipos somos tan importantes como cualquier otra persona. Porque nuestra vida es tan importante y maravillosa como pueda ser la de otro ser humano. Nosotros tenemos nuestros objetivos, nuestros intereses, nuestras inquietudes... y nuestros resultados, porque la relevancia mediatica de una persona no la eleva por encima de otra en cuanto a importancia. Todos tenemos que aportar algo al mundo. Nuestra actitud positiva marca como nuestros equipos afrontarán sus retos, que en definitiva son los nuestros. Las personas que destacan, que nos enseñan, que nos motivan, no son ni más ni menos importantes que nosotros. La única diferencia tal vez es que se hayan ocupado de aprovec

Liderazgo y DIBUJOS ANIMADOS

Los fines de semana aprovecho para estar en casa con mi mujer y con mi hijo. El resto de la semana trabajo fuera y por lo tanto intento aprovechar ese tiempo al máximo. Mi hijo de tres años, el que me lidera desde chiquitito, es un fan absoluto de los dibujos animados. Si con tres años no lo es, no sé cuando lo será. Además, sus "obligaciones" de chiquitín se lo permiten. Esto quiere decir que a mi edad, me conozco practicamente toda la parrilla de series animadas que existen en TV, sea cual sea el canal, y el otro día en uno de ellos estaban poniendo un episodio de "Los Pinguinos de Madagascar". Para aportar pistas puedo decir que estos pinguinos son los que aparecian en la pelicula "Madagascar" y de los cuales han hecho una serie exclusiva. Si vemos los episodios podremos comprobar que son un grupo homogeneo y unido ante las adversidades y pruebas que tienen que pasar para quedar por encima de los retos que normalmente le marca un "

"Se nos va el vino en catas". ANALIZAR Y ACTUAR CON DECISION

"La mayoría de la gente dedica mas tiempo y energía hablando de los problema que afrontándolos". Henry Ford. Suele pasar muy a menudo. Sabemos que hay un problema y empezamos a analizar, y a analizar, y a analizar, y darle vueltas, y a ver como, y a ver como no.... entonces, pasa lo inevitable, se nos acaba "yendo el vino en catas", tal como dice este dicho que en La Mancha utilizamos bastante. Y es que cuando nos hemos dado cuenta, ya es demasiado tarde. El dicho es muy claro. Abrimos la botella y probando poco a poco a ver como está el vino, terminamos por bebernos la botella, y cuando vamos a comer o a cenar, no nos queda. Con los problemas pasa igual. Hay una cosa clara: Por mas que hablemos sobre algo que está saliendo mal, esto no cambiara, ni mejorara. Al contrario, lo único que hará sera reafirmarnos en la idea de que, es cierto, y que realmente algo esta fallando. Pensando en el error/problema/contratiempo, o como queramos llama