Antes de continuar con el artículo, os diré una cosa: Creo firmemente en que todo lo que nos ocurre, o nos deja de ocurrir en la Vida, tiene una razón. Creo en las causalidades por encima de las casualidades, porque aunque pueda parecer lo contrario, muchísimas de las cosas que nos pasan dependen absolutamente de nosotros, y de cómo vemos, e interpretamos, todas las señales que la Vida pone en nuestro camino. Esas señales están por todas partes, lo que ocurre es que, en muchas ocasiones, y por pura conveniencia no queremos verlas, o al menos no queremos verlas tal y como son, sino que las adaptamos a lo que creemos que más nos interesa en cada momento. Cada momento que vivimos es una señal, cada experiencia es una señal, cada acción es una señal, cada inacción es otra. Toda nuestra Vida está repleta de ellas. En las cosas que vemos, en los pensamientos que tenemos, en las emociones que sentimos, las señales están por todas partes, intentando que las comprendamos y qu...