Hoy comenzaré con una frase que es una obviedad en si misma: “La Vida siempre está en marcha”. Lo sé, tanta lógica viniendo de mí no parece muy normal. Por eso, seguidamente, os formulo una pregunta: ¿Cómo puede haber personas que intenten permanecer inmóviles, sin decidir, ni hacer nada la mayor parte de su tiempo? Es más: ¿Cómo es posible que en pleno siglo XXI todavía haya empresas manteniendo en posiciones de mando y dirección a personas como éstas? Evidentemente, alguien que intenta siempre estar de perfil no puede tener la categoría de líder. Quien no da un paso al frente cada día no hace otra cosa que estancarse voluntariamente, y las empresas que lo permiten están abocadas al fracaso. La falta de proactividad, el ceñimiento extremo a los procedimientos, la escasez de atrevimiento, el intentar siempre quedar bien, el exceso de sumisión, etc, son algunos de los síntomas que podemos observar con frecuencia en éste tipo de personas. Personas que, utilizando un...