El tiempo no es mas que el momento que transcurre mientras hacemos o dejamos de hacer algo, y se suele encontrar en el mismo sitio en el que nos quejamos de la falta del mismo. Por eso, en lugar de hablar de él, un líder se ocupa de aprovecharlo al máximo. Y es que un líder no espera a que el Universo conspire a su favor, sino que aprovecha cualquier situación para hacer que sea la mejor posible, con las herramientas de las que disponga y en el lugar en el que se encuentre, aunque eso si, con su actitud, ya que sabe que es lo que únicamente está en sus manos poder decidir. Un líder sabe que no puede esperar a que todo el mundo esté de acuerdo con él, ni que lo que hace sea del agrado de todos, cosa que no le hace bajar los brazos, ni desistir en sus decisiones ni acciones, ya que las basa fundamentalmente en sus valores, y no en el que dirán los demás, a la vez que entiende que una vez lo haga estará aportando una cosa muy importante, un valor que tan solo el puede añadir, y ...